miércoles, 14 de octubre de 2015

Littlemill, mucho más que una whisky inversión

En busca de la destilería perdida

Con motivo del lanzamiento de Littlemill 25 años 2015 anual release, el  escritor Steven Rush en combinación del Grupo Loch Lomond, han tenido la gran idea de organizar una cata interactiva de tal whisky y tuvieron la amabilidad de regalarme unas muestras, las cuales voy a catar hoy con vosotros.
Como ya detallaba en pasados artículohttp://compartamoselwhisky.blogspot.co.uk/2015/03/las-reglas-para-sacar-dinero-de-tu.html ),  Las numerosas clausuras de destilerías en los años 80, tuvieron como resultado , el lanzamiento de ediciones limitadas que se han convertido no solo en objeto de culto pero tambien en buenas maneras de hacer dinero.

Una de estas destilerías es Littlemill, la cual fue definitivamente clausurada en 1994. Littlemill llama la atención por ser posiblemente una de las destilerías más antiguas de Escocia ( 1772), aunque esta oficialmente ubicada en la frontera entre las Highlands y Lowland, esta destilería se puede considerar como una Lowland, debido a que en esta se usaba en sus inicios las tradicional técnica de la tripe destilación, la cual es responsable del carácter ligero de los whisky de la región mas austral de Escocia. Por último, Littlemill destaco por su carácter innovador y experimental, llegando a jugar con la turba, lanzando al mercado las rarísimas Dumbuck (altamente turbada) y Dunglass (sin turbar).
Tras su clausura este whisky singular solo ha sido disponible por medio de independent bottlers, uno de ellos es el grupo Loch Lomond el cual se hizo con varias barricas de 1989 y 1990.  De estas barricas, las 10 mejores fueron seleccionadas por los masters blenders John Petersen y Michael Henry. Todas ellas fueron “casadas” para crear un excepcional Single Malt of 25 yo, madurado en una mezcla de barricas europeas y americanas, además de haber sido finalizadas en barricas de 1 st fill Oloroso Casks.

Bueno me dejo de palabreo y pasemos a los hechos aquí os dejo mis notas de catas:
Aromas: Bizcocho de almendras con chocolate. Se detectan también aromas a piña y fresa.
Sabores: Deliciosos tonos de vainilla tostada, se complementan a la perfección con eucalipto, notas de mermelada de frambuesa y suaves taninos.
Final: Un elegante recordatorio de sabores avinados y especiados.

Veredicto: Este whisky no es solo una excelente pieza de colección, sino que es un whisky muy complejo donde se notan los 25 años de maduración y la variedad de barricas utilizadas para su maduración.

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